01 febrero, 2007

Preguntas y respuestas

Estuve tentada muchas veces por la idea de escribir y mostrar lo que yo creo; pero, en cada una de esas veces, me choqué contra los fantasmas del ¿Para qué? ¿Con qué propósito? ¿De que sirve? ¿A quien le importa? Esos fantasmas que me hacian volver hacia atrás con el delete... o dejar la lapicera y hacer otras cosas.
Y hoy! Cuando esos fantasmas hicieron aparición en vez de paralizarme me dije: ¡Bien! ¿Hay preguntas? ¡Hay motor! Solamente basta el intento de contestarlas, para que surjan otras... y movilizar y convertir ideas en concreciones.
Entonces respondo: escribir para saciar mi infinita necesidad de hacerlo, con el propósito de que mis anhelos se satisfagan porque me sirve, me llena, me alcanza, me completa; y aunque se que a nadie le importa o ni siquiera se toma la molestia de pensar si puede llegar a importarle, con que me dé a mi la sensación de bienestar que experimento, me basta.
¿Pensamientos egoístas? Si, definitivamente; pero acaso alguien se pregunta ¿Por qué uno es egoísta? ¿Es malo serlo? Cuando pienso en que me duele la cabeza, ¿En quién estoy pensando? ¿Y cuando pienso en que tengo hambre? ¿Por qué en todos los ámbitos de la cotidianeidad del ser humano, ser egoísta es lo mas “común” y serlo en los sentimientos nos convierte en personas viles y detestadas?
Y otra vez el pensamiento es crisis, o la crisis se volvió pensamiento y ahora ya no pienso para solucionar algo, sino que hay algo que me hace pensar… y el pensamiento me abre mas preguntas, cada vez mas alejadas de mi realidad, remontadas a lo eterno ( o a lo efímero, da igual) Y me río de las respuestas, no porque sea un ser excepcional que las conoce en su totalidad sino por lo contrario. Me río de la necesidad de las personas por encontrar respuestas, porque no quieren entender que no es la respuesta lo que les hace falta, sino la necesidad de preguntar....